Según las últimas encuestas casi un tercio de los españoles se encuentran en riesgo de exclusión social, carecen de recursos para pagar el alquiler, la comida o los servicios de luz, agua y gas. La situación empeora más aún cuando estas personas tienen hijos a su cargo. Miles de niños y niñas españoles sólo toman una comida al día, la que les dan en los comedores escolares, ya que sus padres y madres se encuentran en el paro y la situación no tiene pinta de que vaya a cambiar.
El riesgo de exclusión social es mayor cuando se trata de ciudadanos extranjeros, mujeres solteras con hijos o personas sin estudios básicos. En todos estos casos, el peligro de caer en la pobreza aumenta considerablemente, ya que ven muy limitadas sus posibilidades de exclusión social. En el otro lado, se encuentran las personas con estudios superiores, casadas con o sin hijos y con ciudadanía española. Estas personas difícilmente correrán peligro de ser apartados del sistema.
La comida, un bien básico que no debería faltar en ningún hogar del mundo, es ahora un recurso fuera del alcance de millones de personas pobres, sobre todo mujeres y niñ@s, los más afectados por la pobreza. Y es que llegar a fin de mes está cada día más difícil para muchos españoles, que deben recurrir a los servicios sociales para poder alimentar a sus hijos.
Y así, con la idea de intentar mejorar la situación de todas estas familias nace la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), como asociación sin ánimo de lucro y que a día de hoy acoge un banco de alimentos por cada provincia, como mínimo, aunque algunas comunidades han formado otras federaciones a nivel regional, como Andalucía, Cataluña, Galicia, Castilla-León, Euskadi y Castilla la Mancha.
¿De dónde proceden los alimentos que recoge el Banco de Alimentos?
La comida depositada en los bancos de alimentos procede tanto de particulares como de empresas privadas, aunque estas últimas serían las que, a través de convenios y acuerdos, aportarían mayor cantidad de donaciones. Entre las empresas colaboradoras destacan la del sector alimentario, transporte, logística, construcción, entidades financieras o servicios, como es el caso de la empresa Eurobrill, S.L. una compañía dedicada a los servicios de limpieza en Barcelona., orgullosa de colaborar con entidades sin ánimo de lucro como un medio para volver a la sociedad parte de los beneficios obtenidos en la actividad empresarial. Cabe destacar la aportación de 1000 kgs de alimentos en la recaudación realizada en nuestra población a través del Banco de alimentos y el envío de material escolar a varios poblados africanos. Su alto grado de compromiso, así como su amplia gama de de máquinas de fregar y de barrer y su flota de vehículos propia, convierten a esta compañía en todo un referente dentro del sector de los servicios en nuestro país.
El Banco de Alimentos de Alicante
Coordinada por la Federación de Bancos de alimentos de España, nace el Banco de Alimentos de Alicante, fundado en 1993 y situado a partir del año 2002 en una nave cedida por Mercalicante. A diferencia de la FESBAL, esta organización sin ánimo de lucro carece de cadena de distribución para evitar así los gastos derivados de ésta, siendo casi todo el trabajo realizado exclusivamente por voluntarios y voluntarias, y sin apenas presupuesto. La labor de voluntariado de estas personas, la mayoría jóvenes, no tiene precio, y sin ellas, esta federación no sería posible.
La mayoría de las donaciones que recibe el banco de alimentos de Alicante procede de particulares que donan sus excedentes de fruta y hortalizas recogidos en sus campos, y en menor medida, la empresa privada. El total supone un 3% de lo que mueve la red estatal compuesta por 52 entidades que forma parte de una federación galardonada con el Premio Príncipe Felipe de la Concordia en el año 2012
La inestimable participación del voluntariado hace realidad el sueño solidario de esta federación. ¿Te animas a ser voluntario del banco de alimentos de tu comunidad?
Ser voluntario o voluntario proporciona una serie de capacidades para el desarrollo personal, comunitario y social. Conciencia, promueve el espíritu de equipo y aumenta el nivel de felicidad.